Muro fronterizo mexicano-estadounidense en el estado de Sonora (México).
La construcción del muro entre EE.UU. y México no es una idea promovida por la Administración Trump, ya que se ha está construyendo desde hace tres décadas.
En un artículo publicado en RT, el periodista Al-Dabi Olvera explica que la construcción del muro de separación entre EE.UU. y México no es una cuestión planteada y seguida por el presidente estadounidense, Donald Trump, pues diferentes gobiernos del país norteamericano han edificado 1050 kilómetros de barreras desde hace más de 30 años.
De acuerdo como Olvera, Estados Unidos ha levantado diversas barreras para detener la inmigración en su frontera sur (la cual mantienen con México) desde 1986 hasta hoy.
En 1986, la Administración de Ronald Reagan aprobó la Ley de Reforma y Control de Migración, y comenzó a construir algunas cercas, que alcanzaron los 106 kilómetros a partir de 1990, durante el mandato de George H.W. Bush.
No obstante, el proceso se congeló durante la presidencia del demócrata Bill Clinton, ya que su esposa y candidata del mismo partido en las elecciones presidenciales de 2016, Hillary Clinton, se puso del lado de los migrantes latinos.
“La infraestructura que con Clinton medía apenas 16 kilómetros hoy alcanza los 1050 kilómetros, alrededor del 33 % de la frontera entre México y EE.UU. Con ese dirigente, también comenzó la Operación Guardián —que incluía medidas policiales y patrullaje militar— y se aprobaron leyes propuestas por el Partido Republicano que, hoy en día, todavía provocan deportaciones y separaciones familiares”, señala Olvera.
El muro se extendió por California, Arizona y Nuevo México en 1995, en donde se amplió en 2003, 2004 y 2010. En 1997, la Operación Río Grande provocó nuevas edificaciones en los límites de Texas con Coahuila —hasta Piedras Negras, 105 kilómetros— y Tamaulipas, con 345 kilómetros desde Laredo hasta el golfo de México.
Hoy en día, esa serie incontinua de separaciones físicas se rige bajo tres operaciones: ‘Gatekeeper’ en California, ‘Hold-the-Line’ en Texas y ‘Safeguard’ en Arizona.
De hecho, en Tijuana ya hay tres muros: una reja eléctrica, una de cemento y una de barrotes. Asimismo, funcionan detectores de calor y movimiento, y varios helicópteros sobrevuelan sus playas hasta la costa de San Diego, mientras que drones (aeronaves no tripuladas) vigilantes sobrevuelan otras partes del muro, explica Olvera.
Estos días ha aumentado la tensión entre México y EE.UU., en particular, desde que Trump firmara el miércoles un decreto que autoriza el inicio de la construcción de un muro en la frontera con México. Además, insistió en que el país latinoamericano costeará, de una forma u otra, la faraónica obra.
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