terça-feira, 27 de setembro de 2016

EE.UU. es autor principal de provocación de la nueva guerra nuclear en la Península Coreana


La situación de la Península Coreana está cayendo en la coyuntura incontrorable e irreversible del estallido de la guerra nuclear por las provocaciones político-miliatres del imperialismo yanqui y títeres surcoreanos.

La República Popular Democrática de Corea está tomando las medidas autodefensivas del fortalecimiento de la fuerza nuclear para defender su soberanía y subsistencia frente al aplastamiento político-militar del imperialismo norteamericano de siglo tras siglo.

Bajo la incitación norteamericana la banda tridora de Park Geun-hye echó maldiciones de convertir su ¨política en cuanto a Norcorea¨ en la de ¨cambio del gobierno de ésta¨, provocando así a la medida autodefensiva de nuestra fuerza nuclear.

Por otro lado, el 21 del presente, el ministro de la defensa del Sur de Corea echó las palabrotas provocativas de que bajo la instrucción de Park Geun-hye están preparando la unidad especial para la eliminación de la Dirección Suprema de Corea.

Los bandidos militares de Surcorea ya están en estado de haber deplegados en disposición de guerra la fuerza de operación especial del ¨descabezamiento¨ para el ¨ataque directo a la Dirección de Norcorea¨ y ¨reducción a cenizas de Pyongyang¨ y otros misiles de ataque a precisión y están haciendo esfuerzos frenéticos para materializar su maquinación feroz introduciendo los equipos de guerra nuclear de los EE.UU.


El imperio norteamericano ha movilizado a las aguas marítimas de la Península Coreana el portaaviones ¨Ronald Regan¨ y otros submarinos nucleares e hizo que los dos bombarderos B-1B realizaran el vuelo de ida y vuelta por el espacio de Demarcación Militar de la parte de Corea del Sur con el ejercicio de lanzamiento de bombas nucleares y luego desplegó uno de ellos en la base aérea Osan surcoreana.

Todo esto reside en el plan de atrocidades perversísimas del imperialismo norteamericano de ataque de sorpresa a Corea si se le da la oportunidad en cualquier momento.

Por ser poco todo esto, no vacilaron de hacer provocación militar de introducir el destructor con proyectiles teledirigidos a las aguas marítimas de Corea del Norte.

Todo esto revela que los EE.UU. es autor principal de provocación de la nueva guerra y agravación de la situación de la Península Coreana que acarrea la situación de ésta a la víspera de la guerra nuclear incontrolable, introduciendo contínuamente los bombarderos nucleares bajo el pretexto del fortalecimiento de la fuerza disuasiva nuclear de Corea.

La meta final de los alborotos imprudentes de la presión militar de los EE.UU. y los títeres surcoreanos es el cambio del gobierno de Corea con la eliminación de la Dirección Suprema de ésta.
La realidad comprueba con toda claridad que nuestras medidas del fortalecimineto de la capacidad de ataque nuclear son justas con toda razón y nadie puede criticarlas.

Corea no es el Medio Oriente ni África, sino potencia nuclear del Oriente con la posesión de cohetes estratégicos.

EE.UU. y los títeres surcoreanos deben estar muy conscientes de que el único camino para evitar el ataque demoledor del indignado ejército de Corea es meditarse con prudencia sin ofender nuestra dignidad y seguridad.

Comité de Relaciones Culturales con el Extranjero de RPD de Corea
Instituto de Amistad Coreano-Latinoamericano y del Caribe