Integrantes del movimiento popular yemení Ansarolá celebran victoria.
Las tropas del Ejército yemení, apoyadas por combatientes del movimiento popular Ansarolá, han tomado el control de una base militar saudí en la región de Asir, en el suroeste del reino árabe.
Durante la operación llevada a cabo este miércoles, el Ejército y las fuerzas de Ansarolá han incendiado dos almacenes de armas en la localidad de Al-Jurma, en la región de Asir, y han abatido a un número de militares saudíes, ha informado la agencia oficial de noticias yemení SABA.
Varios vehículos militares saudíes también han sido destruidos por el fuego de artillería del Ejército yemení.
Las fuerzas yemeníes han logrado avances, además, hacia las posiciones del Ejército saudí en la region de Jizan, en la frontera con Yemen, después de destruir con misiles la torre de vigilancia de Al-Dujan.
Asimismo, las tropas del Ejército y comités populares yemeníes han bombardeado en esta jornada la base militar saudí en Malhama, ubicada en Jizan, obligando a retroceder a los uniformados saudíes.
Desde el comienzo de la agresión saudí a Yemen en marzo de 2015, las fuerzas yemeníes han respondido a los ataques, llevando a cabo operaciones contra las posiciones saudíes tanto dentro del territorio yemení como en el suelo saudí, y sobre todo en las regiones de Najran y Asir, en las fronteras comunes.
Los bombardeos saudíes contra Yemen tienen como objetivo eliminar de la esfera política a Ansarolá y restaurar en el poder al fugitivo presidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, fiel aliado de Riad. La ofensiva ha dejado hasta la fecha más de 7000 yemeníes muertos, según el Ministerio de Salud de Yemen.
En sus ataques, que han recibido duras críticas regionales e internacionales, Riad incluso ha recurrido a armamentos prohibidos como, por ejemplo, municiones de racimo.
ftm/ncl/nal - HispanTv
